este tema, pero el oscurantismo decidido por el diario donde se publicó el
artículo, y la buena fe de algunas personas que lo han puesto escaneado en
la red, me obligan a tomar una decisión.
Muchas personas ciegas no tienen acceso fácil a la prensa, y algunas no son
tan diestras en el manejo de ficheros de imagen como para poder conseguir la
información.
Por ello, agradeciendo a mi madre que me dio el pecho, a Francisco que puso
las imágenes en la red, y a Delia que me facilitó el enlace, os dejo aquí el
texto extraído de las cinco páginas del artículo esperando sea de vuestro
interés.
***
DAR EL PECHO SÍ 0 SÍ
POLÉMICA
VACA'
La OMS, UNICEFy millones de médicos defienden con incontestable insistencia
las bondades de la leche materna Muchas mujeres se sienten presionadas a
amamantar y viven experiencias traumáticas. Algunas feministas ven tras
estas campañas el propósito de alejar a la mujer del mercado laboral. B
Carmen Machado^^^^^W Alvaro Villarrubia
LECHE EN ALZA
En un tiempo de exaltación de los valores naturales, las corrientes pro
lactancia están en auge.
"Cada tres horas yo miraba el reloj y
decía: 'Dios mío, ¡otra vez esta tortura!'. Tenía un dolor insoportable, se
me formaban grietas en los pechos, la niña no se enganchaba a mamar, se
quedaba con hambre. Yo lloraba, ella lloraba y mi marido se desesperaba.
Para matronas, médicos y enfermeras, el bebé es importantísimo, pero la
madre es como si no existiera. Sólo te dicen que tienes que dar el pecho
como sea". Para Lidia Curto, una madre de 33 años que trabaja en Madrid en
el departamento de publicidad de una gran empresa y tuvo a su hija hace 10
meses, la experiencia de la lactancia se convirtió en un camino plagado de
dificultades. Pese a la angustia que le producía no poder dar el pecho a su
hija satisfactoriamente, el personal sanitario que la rodeaba intentó que lo
hiciera a toda costa sin tener en cuenta que estaba al borde de la
depresión.
Como ella, muchas mujeres se enfrentan a la llegada de un hijo decididas a
darle lo que se supone que es mejor para éL la leche materna. Pero muchas
abandonan y a menudo deben hacer frente a la etiqueta de "mala madre". El
80% de las mujeres españolas quiere amamantar a sus hijos cuando da a luz,
pero la cifra baja hasta el 68% a las seis semanas. A los tres meses, casi
la mitad de las mujeres abandona la lactancia, según el último estudio de la
Asociación Española de Pediatría (AEP).
Esto sucede a pesar de las insistentes recomendaciones de la Organización
Mundial de la Salud (OMS), de UNICEF, de organismos sanitarios
internacionales y de la propia AEP, que desarrolla campañas en nuestro país
a favor de la lactancia materna. Según los profesionales sanitarios, las
causas habría que buscarlas en la falta de información de las madres o en su
creencia errónea de que tienen poca leche o que es de mala calidad.
La tendencia a la baja no es exclusiva de las españolas. Según recientes
infor- V mes de la OMS, los niños menores de seis meses alimentados
únicamente con leche materna no llegan al 35% en el mundo. En EEUU sólo el
12% de las mujeres dan exclusivamente el pecho durante seis meses. En
España, el 36%.
Al mismo tiempo que en todo el mundo aumentan las campañas pro lactancia
mater-na, crece la fuerza de corrientes de opinión que se cuestionan el acto
de la lactancia en síy la presión que se ejerce sobre las mujeres para que
den de mamar.
"Cuando le dije al médico de ca becera que quería darle el pecho al bebé
tres meses, porque me tenía que incorporar a trabajar, me dijo que de
ninguna manera, que lo que tenía que hacer antes de ir a trabajar era
extraer la leche con un sacador, congelarla y dársela al volver. Pensé que
aquello era tremendo y me produjo aún más estrés", relata Lidia.
No todas las experiencias son tan duras. Belén Cabal es traductora, tiene 46
años y hace ocho, con 38, tuvo un hijo al que estuvo amamantando durante 26
meses. "Para mí sólo hubo ventajas", explica. "Lo hice porque pensaba que
era bueno para él, que le iba a dar más protección y anticuerpos y también
porque pienso que ese contacto con la madre es más positivo, y fue muy
placentero. No tuve ningún problema, no se me formaron grietas ni se me
estropeó el pecho. Tengo la talla y el pecho de siempre. Tampoco me mordió
ni me molestó con los dientes".
Hasta los ocho o nueve meses, su retoño tomó exclusivamente leche. Cuando el
pediatra se lo indicó, le introdujo papilla de fruta y alimentos más
sólidos. "Lo que hacía entonces era darle el pecho al final", comenta, "como
suplemento, sobre todo para dormir, porque le relajaba. Nunca quiso chupete
ni tetinas, porque estaba acostumbrado al contacto con la piel".
TRABAJO EN CASA. Dejó de dárselo poco después de los dos años. "En esa
época", recuerda, "trabajaba en casa, nunca tuve ningún problema. Pero si
hubiera trabajado fuera, me habría resultado imposible darle de mamar
durante tanto tiempo".
No es anecdótica esa mención al trabajo. Más allá de consideraciones
médicas, el asunto de la lactancia materna tiene importantes consecuencias
en la vida de las madres. Y quizá lo que sub-yace en el fondo es el debate
sobre el papel de la mujer en la sociedad. El modelo de "mujer
perfecta" -trabajadora dentro y fuera del hogar, buena esposa, atractiva
sexualmente, abnegada madre y cuidadora de los mayores y dependientes- pone
especial énfasis en lo referente a la maternidad. En EEUU, movimientos
feministas advierten de que la lactancia materna se ha conver-tido en la
única opción políticamente correcta y que gobiernos y autoridades sanitarias
se inmiscuyen cada vez más en un asunto en el que la decisión debería estar
siempre en manos de la mujer.
El diario oficial de la American
Academy of Pediatries publicaba, ya en 2005, un informe titulado Política de
Estado. La lactancia materna y el uso de leche humana donde se decía:
"Además de las ventajas específicas de salud para los niños y las madres, se
han descrito también sus beneficios a nivel económico, familiar y ambiental.
Estos beneficios incluyen la potencial disminución de los costes anuales de
atención sanitaria en 3.600 millones de dólares en EEUU; la disminución del
absentismo laboral del padre; más tiempo para la atención a los demás hijos
y a otros asuntos de la familia; la disminución de la carga medioambiental
necesaria para la eliminación de los envases de alimentación artificial; y
la disminución de la demanda de energía para la producción y el transporte
de la alimentación artificial".
Entre las directrices recomendadas para crear un estado de opinión favorable
a la lactancia materna, el informe de la American Academy of Pediatries
señala la creación de programas de formación en las facultades de medicina,
la información a grupos de padres y alumnos o la eliminación de prácticas
hospitalarias que desalienten la lactancia. En otros países -Venezuela, por
ejemplo, elaboró en 2007 una ley que restringe la publicidad de las leches
artificiales-, los gobiernos están dictando normas que establecen la
difusión de las bondades de la lactancia mater-na, así como la preparación
del personal sanitario para este fin.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), "la lactancia materna
reduce la mortalidad infantil y tiene beneficios sanitarios que llegan hasta
la edad adulta. Se recomienda la lactancia materna exclusiva durante los
seis primeros meses de vida y a partir de entonces su refuerzo con alimentos
complementarios al menos hasta los 2 años". Pero la periodista
estadounidense Hanna Rosin, en un artículo titulado En contra de la
lactancia materna, que está recorriendo todos los foros de Internet, señala
que los estudios dedicados a demostrar los beneficios del amamantamiento
(vínculo psicológico entre madre e hijo, mejor coeficiente intelectual del
bebé, menos riesgos para éste de infecciones, leucemia, colesterol,
diabetes, futura obesidad, etcétera) adolecen de prejuicios y falta de
pruebas.
El mencionado informe de la American Academy of Pediatries reconoce que las
investigaciones sobre las ventajas de la lactancia materna "sugieren"
disminución de enfermedades en los bebés, "se asocian con un rendimiento
ligeramente mejor" en pruebas de desarrollo cognitivo del niño,
"posiblemente" indiquen una disminución del riesgo de osteo-porosis para la
madre...
Se sugiere, se asocia, se indica... Pero ¿se puede afirmar categóricamente
que los niños criados con biberón tendrán un peor desarrollo físico,
cognitivo o afectivo que los criados al pecho? Hasta ahora no hay pruebas
concluyentes.
CAMPAÑAS FALSAS. Para la abogada y periodista Lidia Falcón, una histórica
del movimiento feminista en España, "la campaña a favor de la lactancia
materna comenzó al finalizar la I Guerra Mundial. Al estallar la guerra, las
mujeres tuvieron que reemplazar a los hombres en las fábricas, en los
campos, en todos los ámbitos laborales. Pero cuando los hombres volvieron
del frente, ellas fueron desplazadas de los trabajos y enviadas a casa.
Entonces empezó esa campaña supuestamente científica de recomendar la
lactancia materna como imprescindible para la salud del niño. Por supuesto,
se habla siempre de la salud del niño, no de la salud de la madre ni de su
situación laboral o sus derechos sociales. Y así hasta ahora. Es cíclico:
cada vez que hay recesión, las mujeres tienen que volver al hogar".
A su juicio, las campañas sobre la lactancia materna, "son completamente
falsas. Después de un siglo de utilización de la leche artificial vemos que
donde se creó y se empezó a usar, en EEUU y el norte de Europa, los niños
están sanísimos, y alcanzan una altura mayor que los del sur y, por
supuesto, que los africanos de las zonas más pobres, pese a que éstos son
amamantados en su práctica totalidad".
La postura contraria la encontramos enei pediatra Carlos González, fundador
y presidente de la Asociación Catalana Pro Lactancia Materna (ACPAM) y
autor, entre otros libros, de Un regalo para toda la vida. Guía de la
lactancia materna (ed. Temas de Hoy, 2006), quien asegura: "Darei pecho es
una gran satisfacción para la madre. Es cómodo, puedes hacerlo en cualquier
momento y lugar. Y nadie lo puede hacer por ti; no pueden arrebatarte el
protagonismo. El inconveniente, a veces, es la gente alrededor que se dedica
a criticarte, a decir que si no tienes leche, que si tu leche no es buena,
que si lo estás malcriando...".
Para Lidia Curto, desde luego, la experiencia fue de todo menos
satisfactoria. "¿Por qué te cuentan esas milongas de que la lactancia
materna es la mejor herencia que le vas a dejar a un hijo? ¿Por qué te crean
esa presión psicológica en momen-
RECOMENDACIÓN LA OMS ACONSEJA LA LACTANCIA MATERNA, CON AUMENTOS
COMPLEMENTARIOS, AL MENOS HASTA LOS DOS AÑOS
INTENCIONES AL DAR A LUZ, UN 80% DE ESPAÑOLAS QUIERE AMAMANTAR A SU HIJO; A
LAS SEIS SEMANAS, LA CIFRA BAJA AL 68%
SÓLO LECHE MATERNA EN EEUU, UN 12% DE MUJERES DA EXCLUSIVAMENTE PECHO LOS
SEIS PRIMEROS MESES; EN ESPAÑA, UN 36%
tos en que estás con un bajón tremendo?", dice. "Los médicos y las
comadronas sólo querían que diera de mamar al bebé a toda costa. Cuando
estaba al borde de la depresión me planté, logré que me dieran las pastillas
que producen la retirada de la leche y empecé a alimentar a mi hija con
biberón. Ahora es una niña cariñosa y sana que duerme de un tirón y no ha
tenido ni un catarro".
Después de hablar con otras mujeres que se vieron en la misma situación,
Lidia ya no se siente un bicho raro o una mala madre. Y lo tiene muy claro:
"Si tuviera otro hijo volvería a intentar amamantarlo, no desestimo la
lactancia materna, pero, desde luego, lo que no voy a hacer es dejarme
acobardar. Si veo que la situación se repite, no voy a suplicar que me
retiren la leche. Voy a exigirlo".
2 El útero de la madre se contrae rápidamente tras el parto y hay menos
posibilidad de hemorragias. Con la lactancia, este órgano también recupera
antes su forma y tamaño originales.
I Puede llevarse a cabo en cualquier lugar, es gratuita y no es preciso
disponer de biberones. Los componentes nutritivos de la leche materna
cambian con el paso de los días, adaptándose a las necesidades del bebé.
3 La madre que da el pecho pierde progresivamente el sobrepeso ganado
durante el embarazo porque la grasa acumulada en el cuerpo de la mujer se
transforma en la energía necesaria para producirla leche.
3 Se debe vigilar la ingestión de cualquier tipo de medicamentos, ya que los
componentes de algunos fármacos pasan al niño a través déla leche.
I Puede acarrear problemas de salud para la madre, como pechos obstruidos,
pezones agrietados, candidiasis e incluso mastitis. Aumenta el riesgo de
depresión posparto debido a la falta de descanso de la madre.
2 La madre lactante debe ingerir 500 calorías extras al día, yaque la
producción de leche implica mayor esfuerzo metabòlico. La mujer debe
ocuparse de llevar una dieta muy completa, equilibrada y rica en vitaminas y
ácido fólico.
libremente?¿Está mal visto darei biberón? ¿Existe una presión social para
que la mujer se retire del mercado laboral durante meses, incluso años, en
aras de la crianza de los hijos, dejando los escasos puestos de trabajo en
manos de los hombres?
"Es sorprendente que en una época en que nada o casi nada es natural,
empezando, afortunadamente, por los propios par-
MALVISTO. De nuevo, la vivencia de Belén Cabal no puede ser más distinta.
"Nadie me presionó", relata. "Es más, me criticó mucha gente. Me decían que
por qué le daba el pecho siendo tan mayor, que cuándo se lo iba a quitar,
que se le iba a deformar la boca...".
"Actualmente se conocen suficientemente las ventajas de la lactancia materna
y la información que se está dando sobre ella, tanto en los centros de salud
como en los hospitales, es correcta", sostiene Blanca Marcos, médica de
familia del centro de salud Albayzin de Granada. "Sin embargo, como con
otras actividades de promoción de la salud, muchas veces somos demasiado
dogmáticos. Estamos tan convencidos de las bondades de la leche materna que
intentamos trasladar nuestra idea sin indagar en las razones de una madre
para no dar el petos, haya una tremenda presión social para que las mujeres
opten por el amamantamiento del bebé", opina Edurne Uriarte, profesora de
Ciencia Política en la Universidad Rey Juan Carlos, articulista y madre. "Lo
preocupante es que la opción alternativa por el biberón es de una tremenda
incorrección política. Y creo que el fondo de
cho. Diría que damos mucha información, pero sin que exista una buena
comunicación. Y, en ese sentido, algunas mujeres sí pueden sentirse
presionadas".
Parece, pues, que la elección entre lactancia materna o biberón no resulta
tan fácil. ¿Se le ponen demasiados impedimentos a la madre para que pueda
decidir
SENTIDO COMUN . Diversos organismos señalan entre los beneficios de la
lactancia materna el refuerzo del sistema inmunitario del bebé, la creación
de un mejor vínculo entre madre e hijo o la mayor comodidad, pero no todas
las madres ni todos los niños son iguales. Forzarse a dar el pecho puede
ocasionar estados depresivos para la madre. Éstas son algunas ventajas e
inconvenientes de la lactancia materna.
4 Reduce en la madre las posibilidades de desarrollar cáncer de ovario y
mama, debido a la producción hormonal, así como el riesgo de fracturas de
cadera en la menopausia.
4 A las mujeres con trastornos como hipotiroidis-mo, enfermedades de los
pechos, pezón plano o ausencia de leche les resultará muy complicado
amamantar a sus hijos.
5 La leche materna proporciona al bebé anticuerpos que refuerzan su sistema
inmunitario. Ayuda a evitar diarreas y deshidra-tación. Se dice que previene
la obesidad, la diabetes o alergias, aunque esto es aún objeto de debate.
5 Puede ser muy difícil de compaginar con la vida laboral. La leche puede
extraerse y congelarse, pero es un procedimiento engorroso y hace que el
niño se acostumbre al biberón y pueda rechazar el pecho.
esa situación es ideológico y no científico. No hay más que revisar algunos
argumentos psicológicos sobre la importancia del vínculo entre la madre y el
niño creados en el proceso del amamantamiento. Sin ninguna base científica
que pruebe que el vínculo entre madres que han optado por el biberón y sus
hijos sea menor o de peor calidad. Y lo que es igual de criticable, con la
inevitable conclusión de que los hombres no pintan nada o casi nada en la
crianza de los hijos".
Al mismo tiempo que en todo el mundo se impone la opinión casi unánime de
que las madres deben amamantar a sus hijos, cuanto más tiempo, mejor, España
es uno de los países de la Unión Europea que menos tiempo de baja establece
para las madres, apenas cuatro meses. Si las españolas siguieran al pie de
la letra las recomendaciones de la OMS, el mercado laboral se vaciaría de
mujeres en edad reproductiva. Se presiona a las mujeres para que practiquen
lactancias prolongadas, pero se endurecen las condiciones de trabajo, se
generaliza la precariedad, no se prevé alargar los permisos de maternidad y
se concede sólo una hora de pausa para la lactancia durante los primeros
nueve meses.
Muchas veces la mujer debe elegir entre la maternidad y su trayectoria. Un
recién nacido mama entre ocho y 12 veces al día, al menos cada tres horas.
Dependiendo de si cada toma es de 15 o 30 minutos, una mujer invierte entre
2,5 y cinco horas al día ?í en dar de mamar. Si el bebé no se agarra bien al
pecho, a como fue el caso del í de Lidia, la sensación de frustración es muy
grande para la madre y para el hijo. La mujer puede sufrir estrés,
depresión, problemas de sueño, irritabilidad... "Acudí llorando al médico de
cabecera, al pediatra, a la matrona. Todos me dijeron que de ninguna manera
dejara de darle el pecho", dice Lidia. "Como solución, mi doctora de
cabecera me habló de la Liga de la Leche".
Ana Berta Fajó, monitora de La Liga de la Leche de Madrid, tiene 36 años,
es -^
6 Ayuda a establecer un vínculo afectivo entre madre e hijo y estimula el
desarrollo sensorial del bebé.
6 Deja únicamente en manos de la mujer la responsabilidad de la crianza. Si
la mujer se queda en casa, el alejamiento del mundo laboral puede traerle
dificultades al reincorporarse o para ser promocionada.
EVIDENCIAS LOS INFORMES EN FAVOR DE LA LACTANCIA SUGIEREN BENEFICIOS, PERO
HASTA AHORA NO HAY PRUEBAS CONCLUYENTES
PRESIÓN SOCIAL "SI TUVIERA OTRO HIJO INTENTARÍA AMAMANTARLE, PERO NO ME VOY
A DEJAR ACOBARDAR", DICE UNA MADRE
TIEMPO UN RECIÉN NACIDO MAMA CADA TRES HORAS. UNA MUJER INVIERTE ENTRE 2,5 Y
CINCO HORAS DIARIAS EN DAR DE MAMAR
MAGAZINE PÁG. 39
graduada social aunque actualmente no trabaja, tiene dos niñas de 3 y 5 años
y espera un bebé. Cuenta que la Liga es una ONG internacional sin ánimo de
lucro fundada en 1956, miembro del Consejo de ONG de UNICEF y que trabaja
con la Organización Mundial de la Salud (OMS).
"Hoy la Liga atiende cada mes a más de 300.000 madres en 63 países", dice
Berta. "Aquí hay grupos de apoyo en 11 comunidades autónomas y más de 60
monitoras. Ayudamos a las madres a amamantar mediante apoyo, información y
formación madre a madre, y promovemos un mejor entendimiento de la lactancia
como elemento importante en el desarrollo del niño y la madre. Esta labor se
efectúa a través de reuniones, consultas telefónicas, correo electrónico...
de forma voluntaria y gratuita".
Siguiendo las recomendaciones de su doctora, Lidia buscó en Internet la Liga
de la Leche, pero lo que encontró no la convenció. "Lo vi un poco sectario.
Hacen demasiado hincapié en los vínculos psicológicos entre la madre y el
bebé, en la importancia que tiene para la salud del niño, en ífitimonios de
mujeres que dan el pecho durante 18 meses o más... Me parece muy bien la
lactancia, pero a mí no se me ocurre juzgar a una mujer que da el pecho.
¿Por qué habrían de juzgarme a mí por no darlo? No lo entiendo".
A la pregunta de si se está presionando a las mujeres para que opten por dar
el pecho, creándoles complejo de mala madre si no lo hacen, Fajó responde:
"Creo que si una mujer está convencida de lo que hace, nadie puede crearle
complejo de nada".
El pediatra Carlos González añade: "Supongo que habrá alguna madre que ha
recibido presiones para dar el pecho, aunque todavía es mucho más frecuente
que la madre reciba presiones para dar el biberón. Cuando una persona tiene
ganas de hacer algo y no lo consigue, se siente mal. Incluso cuando es una
tontería, como querer ir a la playa. Si es algo importante, si suspendes un
examen o pierdes un empleo, te sientes peor. Y dar el pecho a tu propio
hijo, ¿acaso no es una parte muy importante de tu vida? Es lógico que la
madre se sienta mal, tiene derecho a sentirse mal. Pero nuestra sociedad
muchas veces, no respeta ese derecho".
La filósofa feminista francesa Elizabeth Badinter, muy conocida y polémica
por afirmar que el amor maternal no existe sino que es un comportamiento
social que varía según cambian los tiempos, declaraba recientemente en una
entrevista a la revista Yo Dona : "Se está santificando hoy
Si bien la lactancia materna es tan antigua como la hu-Imanidad, en Europa
se han hallado en tumbas de 'niños recipientes con tetina ya desde 2000 A.C.
También en China se han encontrado en tumbas prehistóricas primitivos
biberones hechos con barro o cuernos de vaca. 'k El código de Hammurabi,
redactado en LA ANTIGUA MES0P0-TAMIA en 1800 a.C., recoge leyes sobre las
nodrizas que amamantaban al hijo de otra mujer por dinero. Entonces la
lactancia duraba un mínimo de dos años y un máximo de cuatro, "k En ESPARTA
la esposa del rey debía amamantar a su hijo mayor por ley En LA INDIA Y
EGIPTO la lactancia debía durar tres años, pero estaba contemplado el papel
de las nodrizas, sobre todo entre las clases altas. El TALMUD HEBREO dispone
que las mujeres debían amamantar obligatoriamente durante tres años, aunque
se excusaba a las madres gravemente enfermas, ^f En ROMA sólo las mujeres
del pueblo daban el pecho. Las damas recurrían a una nodriza, "k A partir
del s. I, con el auge del CRISTIANISMO, prevalece el criterio de que debe
ser la propia madre quien amamante a su hijo, "k E n la EDAD MEDIA continúa
esta norma, pero se admite también para las clases altas el empleo de
nodrizas que incluso podían hacer uso de biberones, "k Tras la CONQUISTA DE
AMÉRICA se importa a Europa la gonorrea y se lleva la sífilis al Nuevo
Mundo. Como se especuló sobre la leche materna como factor de transmisión,
cobró auge la figura de la madre frente a la nodriza, de quien no se sabía
si podría estar infectada. ~k En la FRANCIA DEL SIGLO XVIII la alimentación
infantil incluía lactancia materna, alimentación artificial, papilla y
nodrizas, "k Durante la REVOLUCIÓN INDUSTRIAL comenzó el auge de la
lactancia artificial: las mujeres de las clases bajas tenían que trabajar y
las de las clases altas llevaban una activa vida social. La aparición de la
goma en 1856 permitió fabricar tetinas eficaces. Muchos médicos empezaron a
recomendar que se alternara el amamantamiento con la lactancia artificial a
base de leche de vaca diluida, "k En 1886, el fabricante suizo Henri Nestlé
comenzó la elaboración de un producto alimenticio para combatir la altísima
mortalidad infantil Consiguió una fórmula compuesta de leche, azúcar y
harina de trigo, a la que bautizo como Harina Lacte^la. "k Tras la I GUERRA
MUNDIAL, la incorporación de la mujer al trabajo y la comercialización
masiva de las leches artificiales hicieron que en Europa y Estados Unidos el
porcentaje de niños amamantados fuera sólo del 50%. Después de la II GUERRA
MUNDIAL esta cifra bajó hasta el 25%. "k En los AÑOS 50 DEL SIGLO XX se
produjo un aumento de la lactancia artificial, ya que se propagó la idea de
que las leches infantiles tenían cualidades nutricionales superiores a las
de la leche materna En la DECADA DE LOS 70 resurgió una corriente de opinión
destinada a resaltar los beneficios de la lactancia natural.
día a una madre perfecta, que da el pecho como poco seis meses, que antepone
el bienestar de su bebé por encima de todo. Y esa madre ideal, más aún en un
contexto de crisis económica como el actual, cree que lo mejor que puede
hacer es quedarse en casa con su bebé".
Y añadía: "Vivimos una exaltación de los valores naturales, y por eso hay
una presión insoportable para que la mujer dé el pecho y se ocupe de su bebé
el mayor tiempo posible, incluso para que use pañales lavables. ¿Y eso qué
supone? Que dedique cada vez más tiempo a sus hijos, en detrimento de sus
aspiraciones profesionales".
UN NUEVO FEMINISMO. La monitora de la Liga de la Leche Ana Berta Fajó
argumen-ta que "amamantar forma parte de la na-turaleza de la mujer, como el
embarazo y el parto. Hoy se habla de un nuevo femi-nismo que reivindica
recuperar esa par-te de nuestra naturaleza: amamantar y criar a nuestros
hijos. Yo^io hablaría de re; troceso, sino de un paso hacia delante".
Y el pediatra Carlos González se pregun-ta: "¿Qué tiene que ver la igualdad
de la mujer con dar el pecho? Igualdad se refie-re a tener los mismos
derechos y opor-tunidades. Un permiso de maternidad de más de un año, como
en los países es-candinavos, facilita que la mujer no se vea peijudicada en
lo laboral".
Para la abogada Lidia Falcón, en cambio, "lo que hace dar de mamar es
quitarle responsabilidades al hombre. El no tiene que levantarse por la
noche, pedir bajas laborales o abandonar su trabajo".
Algo parecido se desprende de un artículo de marzo de 2009 de la revista
estadounidense Mother Jones, que recoge el sentir de toda una generación de
mu-jeres criadas con la esperanza de alcanzar la "paternidad compartida".
Con el paso del tiempo, afirman, la lactancia materna hace imposible ese
objetivo. Si la ma-dre es la única que ha alimentado al niño, dicen, acabará
siendo la única que se responsabilice de su educación, su cuidadora, su
única y mejor enfermera..._
Las campañas pro lactancia son un fenómeno creciente, casi una corriente de
pensamiento único. Y no olvidemos que, por encima de todo, debería ser una
opción personal, no una imposición familiar, económica, social ni de ningún
tipo. <9
ji^el artículo CONTRA LA LACTANCIA MATERNA se ^^puede consultar en
http://www.theatlan-tic.com/magazine/archive/2009/04/the-case-against-breast-fee0ing/73ii/.
la página web de la liga de la leche eswww.laligaoelaleche.es
©
TEXTO TRADUCIDO AL INGLÉS
EN ENGLISH CORNER PÁG. 64
PERJUICIOS SEGÚN LIDIA FALCÓN, "SE HABLA DE LA SALUD DEL NIÑO, NO DE LA DE
LA MADRE, SU SITUACIÓN LABORAL 0 SUS DERECHOS"
GASTO SANITARIO LA ACADEMIA AMERICANA DE PEDIATRÍA ESTIMA QUE LA LACTANCIA
PUEDE AHORRAR 2.500 MILLONES DE EUROS
ASOCIACIONES LA LIGA DE LA LECHE ATIENDE A 300.000 MADRES AL MES EN 63
PAÍSES. EN ESPAÑA ESTÁ PRESENTE EN II COMUNIDADES
MAGAZINE PÁG. 4